La SONRISA es un CRISMA que suaviza y transforma la mayoría de nuestras emociones negativas a positivas; una risa espontánea nos hace pensar que las cosas no son tan graves, y reírse del mundo y de uno mismo es una buena terapia personal para no tomarse la Vida como un valle de tristezas y sufrimientos.
Una sonrisa debemos siempre regalarle a la vida como muestra de agradecimiento dirigida a Dios nuestro creador primeramente para que sus efectos se derramen hacia todo nuestro derredor; debemos atrevernos a cambiar esa forma de ver la Vida, atrevernos a vencer los miedos, deshacernos de las corazas que nos acaparan y permitirnos ser uno mismo siempre con una sonrisa en nuestro semblante que emane de lo más profundo del corazón, son grandes pasos para vivir la Vida con plenitud y serenidad lo que nos traerá felicidad a pesar de las variables que se nos presenten en este corto viaje del vivir.
La plenitud de la vida está en nuestras manos y fácilmente la podemos obtener comenzando por sonreír sinceramente desde el amanecer y prolongando esa sonrisa hasta el anochecer, dándonos cuenta y mirando el sin número de regalos que la vida misma nos da sin pedirnos nada a cambio.
¿Y quién es el dador de vida?, pues Dios que merece a diario una gran sonrisa como muestra de agradecimiento de nuestra parte.
“SONRÍE SIEMPRE Y VERÁS LA VIDA DEL COLOR DEL AMOR”
BETTY CALDERÓN
